Sicarios armados mataron al menos a una decena de personas que habían asistido a un velorio en el municipio de San José Gracia, en el occidental estado mexicano de Michoacán.
Según fuentes, se pudo conocer que en el homicidio múltiple, murieron presuntamente 17 personas, quedando registrado en un video que circula en redes sociales, en el que se muestra a hombres armados que bajan de unas camionetas y ejecutan a las víctimas quienes se encuentran contra una pared.
De acuerdo con la información de medios locales, la masacre se registró fuera del lugar del velorio, a donde llegó el grupo armado y sacó a las víctimas para luego fusilarlas.
Los homicidios ocurrieron en una región donde supuestamente el Cártel Jalisco Nueva Generación ostenta el control del territorio.
Pobladores de San José de Gracia usaron las redes sociales para revelar que en el ataque presuntamente murieron al menos diez personas, y llamaron a los habitantes a resguardarse en sus hogares.
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Michoacán señaló que recibió un informe de «detonaciones de arma de fuego«, por lo que desplegaron un operativo con el Ejército y la Guardia Nacional.
Afirmó que el objetivo de dicho operativo es «ubicar a los posibles responsables y generar las condiciones para que el personal de la Fiscalía de Michoacán lleve a cabo las diligencias que permitan esclarecer los hechos».
Por la noche, la Fiscalía estatal emitió un comunicado en el que aseguró que inició una investigación por los hechos ocurridos esta tarde.
La dependencia indicó que al llegar al lugar donde se reportaron disparos con armas de fuego el sitio «se observaba recién lavado, no se localizaron víctimas«.
Efectivos de seguridad tras la búsqueda de los sicarios
Sin embargo, detalló que se encontraron envases de productos de limpiezas, además se recogieron cartuchos repercutidos de armas de fuego de los calibres 9 milímetros, 7.72, 5.56 y 45 milímetros y se requisó una motocicleta y dos vehículos que tenían daños por disparo de arma de fuego.
Asimismo, apuntó que agentes de la Guardia Nacional, del Ejército Mexicano y de la Policía Estatal, mantienen un operativo en los límites de Michoacán y Jalisco para buscar a las posibles víctimas del ataque armado.
El ataque ocurrió en una región donde operan los cárteles Jalisco Nueva Generación (Cjng), de La Nueva Familia Michoacana y de Los Caballeros Templarios, los cuales se disputan a sangre y fuego el control de las actividades ilícitas en la región.
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